Gas radón en edificaciones
Construir casas y edificios saludables es importante. La salud de los edificios y sus instalaciones, puede afectar a los ocupantes de los mismos, y más, cuando ya hablamos de factores externos como el gas radón.
Aquellas construcciones y casas con gas radón, son difíciles de tratar, sobre todo, cuando ya están ejecutadas. Sin embargo, tenemos soluciones para combatirlo.
Vamos a explicar todos los aspectos al detalla, pero primero…¿Qué es y cómo nos puede afectar el gas radón?
¿Qué es el gas radón?
El radón es un gas radiactivo incoloro, inodoro e insípido que se produce de forma natural en el suelo. Está presente en suelos, rocas, el agua e incluso algunos materiales de construcción.
El radón puede entrar principalmente en casas y edificios a través de grietas en el suelo y las paredes de sótano.
Emana fácilmente del suelo y pasa al aire, donde se desintegra y emite partículas, que pueden ser inhaladas depositándose en las células respiratorias.
? Nota: según la OMS, en muchos países, el radón es la segunda causa más importante de cáncer de pulmón después del tabaco.
¿Cómo afecta a la salud de las personas?
El radón es un gas radiactivo que puede tener varios efectos negativos en la salud, principalmente a través de la exposición prolongada. Un resumen de los posibles efectos:
- Cáncer de pulmón: La exposición a altos niveles de radón es la segunda causa más común de cáncer de pulmón después del tabaquismo.
- Problemas respiratorios: La exposición puede llevar a problemas respiratorios crónicos, aunque la relación directa aparte del cáncer de pulmón no está claramente establecida.
- Riesgo para los fumadores: Los fumadores tienen un riesgo mucho mayor de desarrollar cáncer de pulmón por radón en comparación con los no fumadores.
- Riesgo para los niños: los niños podrían ser más susceptibles a los efectos negativos del radón debido a sus tasas de respiración más rápidas y a su rápido crecimiento celular.
Vamos aprendiendo un poco más… ¿Y dónde hay?
¿Qué zonas son propensas al gas radón?
En realidad, la mayoría de edificios contienen radón en concentraciones bajas (concentraciones bastante más inferiores a 300 Bq/m3, que ya hablaremos de este número más adelante).
Pero, existen zonas geográficas en las que, debido a su geología, es más probable encontrar construcciones y edificios con niveles más elevados.
Los suelos arenosos, graníticos y gravas favorecen que el gas aflore al exterior porque son más porosos
En el caso del territorio español, hablando siempre de «potencial», en el siguiente mapa de concentración de gas radón en España podemos ya distinguir las zonas con pronósticos altos (El mapa se puede consultar desde AQUÍ):
? Nota: Para aquellos usuarios que quieren indagar más y ver por poblaciones – zonas concretas – de marera oficial – para el estado español. Desde el Documento Básico HS de Salubridad que podemos consultar AQUÍ, al final, a partir de la Pag 161, está la clasificación de municipios en función del potencial de radón.
¿Qué normativa hay en el control de de casas y edificios?
Aquí, no nos vamos a extender mucho dado que al final del artículo hay un video extenso y explicativo en formato para profesionales técnicos de toda la normativa al detalla, pero sí, de forma general, el marco normativo del radón en España actual:
EL marco normativo para la edificación se puede consultar desde el Documento Básico DB HS 6 en el propio Código Técnico de la Edificación (España). Nos guastaría solo reseñar un punto destacable y que ha sido de debate constante.
? Nota: Según la actual normativa para España, toma como nivel de referencia del promedio anual de concentración de radón de 300 Bq/m3 a nivel nacional y, en concordancia con la Directiva 2013/59/EURATOM. Sin embargo, y de forma clara, la OMS propone un nivel de referencia de 100 Bq/m3 para minimizar los riesgos para la salud derivados de la exposición al radón en interiores ¡No lo entendemos! Pero esto, es otro debate.
Pero… ¿Cómo accede el gas radón al interior de un edificio? O de una vivienda…
¿Cómo llega el gas radón a los edificios?
Cuando el radón llega al ambiente exterior se diluye rápidamente en el aire, pero cuando lo hace a un espacio cerrado y poco ventilado, como puede ser el interior de un edificio, tiende a acumularse convirtiéndose entonces en un problema.
El radón presente en el interior de los edificios puede proceder directamente de:
Vías por las que encontramos randón | Cómo puede afectarnos | Niveles de Randón |
Radón que proceden del terreno | Por convección a través de las grietas o zonas de la envolvente del edificio en contacto con el terreno (muros de sótano, soleras, etc.) | ALTO (Los niveles pueden llegar a ser muy altos) |
Radón que procede de los materiales | Por los materiales de construcción que se han utilizado en la construcción de la obra | BAJO ( la concentración media de radón en el interior de las viviendas con un valor de entre 10 y 20 Bq/m3) |
Radón que procede del agua | Por el consumo aguas subterráneas (de manantiales o pozos) sin que se aireen | BAJO (En aguas superficiales, la concentración media de radón suele ser menor que 0,4 Bq/l y si el agua procede de fuentes subterráneas el valor ronda los 20 Bq/l) |
Como vemos en la tabla anterior, los altos niveles de radón los podemos encontrar en las zonas del edificio que están en contacto con el terreno. Ahí, es donde están las cuestiones a tratar y una dificultad técnica importante ante cualquier actuación sobre las cimentaciones de los edificios y sótanos.
La principal vía de entrada de gas radón en los edificios ¡es por el terreno!
La envolvente del edificio que está en contacto con el suelo será el punto principal ante una posible rehabilitación para reducir las emisiones de radón en el interior de la vivienda. Un esquema de posibles vías de acceso:
¿Qué aspectos influyen en el aumento del radón en las casas?
Aunque la cantidad de radón que podemos encontrar dentro de las viviendas depende de muchos factores, sí que son destacables – sobre todo – los relacionados con el terreno, las características constructivas de la vivienda, el comportamiento de los usuarios o la climatología:
Aumento de niveles de radón por | |
Terreno | Por la composición geológica. Hay tipos de terreno que producen una gran cantidad de radón por altas concentraciones de granito, pizarras y esquistos |
Por la mayor permeabilidad al aire del terreno o mayor facilidad de movimiento | |
Por el grado de saturación de agua del terreno | |
Características del Edificio | Por la proporción de la envolvente del edificio que está en contacto con el terreno |
Por la permeabilidad del edificio ante los gases que existen en el terreno (Grietas, fisuras, etc en sótanos – cimentación) | |
Por el tipo de solución constructiva adoptada en la ejecución de la vivienda | |
Por los elementos e instalaciones que pasen a través de la envolvente del edificio (Ver artículo efectos negativos del aire acondicionado) | |
Por la comunicación ejecuta entre los sótanos y las plantas altas | |
Por el sistema de ventilación | |
Climatología | Por las bajas presiones atmosféricas (a grandes rasgos, más habituales del invierno) favorecen la salida del gas radón del terreno, y las altas, lo dificultan |
Comportamiento usuarios | Por los hábitos de ventilación. Generalmente, la ventilación de los locales en contacto con el suelo disminuirá su concentración de radón por dilución (No sirve de mucho si tenemos niveles de concentración alto) |
¿Cómo se detecta la existencia de radón?
Las concentraciones de radón dentro de las edificaciones pueden ser muy fluctuantes. Por ello, para realizar la medición y detección del radón en casas, se utilizan detectores que hacen una estimación promedio de la cantidad de gas. Pero antes de la medición, tenemos que considerar:
Recordemos que el promedio anual de la concentración de radón debería ser inferior a 300 Bq/m3
Existen diferentes detectores de radón, y su elección dependerá del objetivo de la medición. En líneas generales, podría decirse que los detectores se clasifican según el método de medición, integrada, continua o puntual; y según su fuente de alimentación, activos o pasivos.
Los tipos de detectores de gas radón pueden medir la concentración de un gas mediante 3 métodos:
- Medición integrada: Son los más utilizados debido a su bajo coste. Utilizan trazas, carbón activo y electrodos para proporcionar un promedio. Por lo general, el laboratorio envía el detector por correo y el usuario lo devuelve una vez pasado el tiempo de medición para que el laboratorio realice el análisis de la medición. Por lo general no se conectan a ninguna fuente de alimentación, por lo que son pasivos.
- Medición en continuo: Son aparatos electrónicos que además de realizar un promedio anual, permiten observar la evolución de la concentración de radón a lo largo del tiempo, por lo que se pueden observar las alteraciones producidas por los cambios climáticos y otras variables. Requieren una fuente eléctrica para funcionar, por lo tanto, son activos.
- Medición puntual: A diferencia de los dos anteriores no pueden ser utilizados para realizar una determinación del promedio anual, sin embargo, son muy útiles para realizar un diagnóstico rápido de los puntos de entrada de radón como grietas, fisuras, huecos u otras discontinuidades en la estructura.
¿Qué soluciones podemos aplicar para reducir el gas radón en casas?
Obviamente, aquí entra en juego la aplicación de la normativa de cada país (Recordemos que, para España, es el Documento Básico DB HS-6 del Código Técnico de la Edificación) pero está vez, además, mostraremos donde encontrar unas fichas técnicas destinadas a profesionales son una delicia.
Pero, primero, queremos mostrar la clasificación de las soluciones según su forma de actuación, que además, serán correspondidas con fichas técnicas:
Las soluciones orientativas de protección frente al radón en edificio, sea para una Obra Nueva o rehabilitación (Edificios existentes) más adecuadas van en función de la concentración de radón. Para España se plantea:
Promedio anual de concentración de radón (Bq/m3) | Soluciones de protección |
≤600 | Disposición de barrera de protección |
Sellado de fisuras, grietas, encuentros y juntas | |
Empleo de puertas estancas | |
Creación de sobrepresión en los locales a proteger | |
Mejora de la ventilación del espacio de contención | |
Mejora de la ventilación de los locales habitables | |
>600 | Creación de espacio de contención |
Instalación de sistema de despresurización del terreno |
Por supuesto, desde una perspectiva técnica de obra se requiere tratar muchos aspectos con más detalla, profundidad y siempre con profesionales cualificados.
Fichas soluciones constructivas frente gas radón
Además de la Normativa de aplicación, hay una serie de 10 Fichas técnicas de aislamiento y soluciones al radón que son ayuda a los técnicos. Nos proporcionarán vías para proteger a la población de los efectos perniciosos sobre la salud que pueden derivarse de la exposición prolongada a concentraciones elevadas de gas radón. Un ejemplo parte de la calidad de la documentación:
Las 12 guía constructivas de barreras frente al gas radón en edificios se pueden consultar desde AQUÍ incluido el Manual guía del Código Técnico de la Edificación.
Una cuestión importante y que no debemos de olvidar es la efectividad de las distintas soluciones de protección. Dependiendo de las características del edificio y la concentración medida en cuestión, será más eficiente utilizar una solución de obra u otra e incluso habrá que utilizar soluciones de forma acumulativa.
En la imagen adjunta, se orienta sobre la efectividad de las distintas soluciones constructivas propuestas distinguiendo entre concentraciones de radón superiores (en rojo) e inferiores (en amarillo) a 600 Bq/m3, medidas en los locales – espacios habitables.
No debemos olvidar que estamos ante una situación compleja que se necesitan soluciones complejas de obra y que van aparejadas a una aplicación de una normativa extensa. Para esclarecer muchos conceptos, en el siguiente vídeo se realiza un repaso profundo de la nueva sección de protección frente al radón:
Cómo justificar las medidas adoptadas para solucionar problemas gas radón
Ya hemos visto por donde aparecen el gas radón en las viviendas, cómo actúa y las posibles soluciones constructivas. Ahora, toca informar en papel de cómo se ha procedido a solucionar el problema con actuaciones técnicas y basándonos en el DB-HS6 del código técnico. Dos documentos nos pueden ayudar.
- El checklist para la comprobación del nuevo DS-HS6 de Chova: una plantilla formulario en PDF que sirve para la comprobar, paso a paso, que se ha cumplido con el DB-HS6.
- El Generador de Memoria Justificativa del DB HS 6 Protección frente a la exposición al radón. Se generar un documento en formato *.rtf (editable desde cualquier editor de textos) que justifique las medidas adoptadas para limitar el riesgo de exposición de los usuarios a concentraciones inadecuadas de radón procedente del terreno en el interior de los locales habitables.
Aunque el radón es un gas inocuo en ambientes abiertos, constituye una amenaza latente cuando se acumula en el interior de los hogares. Y es que, como todo gas responde a las leyes físicas y químicas de concentración y presión, razón por la cual hay que estar vigilantes respecto a los niveles que alcanza en el interior de las edificaciones.
Pocas personas son conscientes de esta problemática, por lo tanto, es importante difundir oportuna y masivamente información referente a los riesgos que entraña esta sustancia a la salud respiratoria y a la aparición del cáncer de pulmón. Recuerda que la arquitectura bioclimática también aporta, en parte, salud a los edificios.
Otras guías de interés y más sobre cómo afecta el gas radón a la salud en el entorno laboral desde UGT y desde el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el trabajo AQUÍ.
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Muy interesante
Saludos
Desde Argentina