Climatización de edificios gracias al calor corporal
Pocas veces se habla de nuevos conceptos en el campo de la climatización de locales y naves, o mejor dicho, de nuevas ideas de captar calor para producir energía.
En pocos años, la climatización a dado un salto cualitativo en tecnología ¡aparatos super eficientes! Pero seguimos desaprovechando multitud de situación donde el desperdicio de energía es palpable.
Un ejemplo sonado, estudiado y conocido, es el tema del metro y los trenes, con su movimiento y o el frenado puede producir grandes cantidades de energía que todos los días es desaprovechada.
Ahora… ¿Qué pasa si atrapamos el calor humano de los asistentes cuando la discoteca está a tope? Captar ese calor residual para producir energía y poder enfriar o calentar el local o nave, cuando queramos.
Y sí, canalizar la energía desde la pista de baile será la insignia del espacio multidisciplinar SWG3, en Glasgow. Discoteca en fin de semana, oficinas y sala de exposiciones entre semana.
Para que tengamos una perspectiva del proyecto, simplificamos cómo se obtendrá el calor. Tendríamos algo como el esquema siguiente…
La sala SWG3, va a ser sometido en los próximos dos meses a una reforma radical que le permitirá absorber el calor generado en el espacio de la discoteca (Tiene capacidad para 6.000 personas), almacenarlo en las profundidades del suelo y devolverlo al local, cuando no esté lleno ¡así de simple!
El concepto está enmarcada en el proyecto BODYHEAT. Promovido por la empresa TownRock Energy especializada en tecnologías de calefacción y refrigeración geotérmicas, y los consultores de eficiencia energética e ingeniería Harley Haddow.
El objetivo del proyecto es cubrir la demanda de calefacción y refrigeración del edificio SWG3 con bombas de calor acopladas al suelo, para capturar y almacenar el calor residual que producen los asistentes el fin de semana, y extraerlo del suelo, para calentar el lugar, entre semana.
Según la empresa, la energía de la gente será suficiente para calentar el edificio durante los meses más fríos
Primero, tenemos que entender que el calor del cuerpo se pierde por varias vías; radiación, convección, conducción y evaporación (Si quieres indagar más sobre los mecanismos de perdida de calor AQUÍ).
En segundo, lo tradicional en una bomba de calor geotermia es perforar el suelo donde se insertan unos serpentines. Unos tubos largos llenos de líquido que actúan como conducto entre la temperatura relativamente constante de 50 grados de las rocas del suelo y la calefacción, la ventilación y el aire acondicionado de un edificio.
La temperatura estable del interior de la Tierra puede ser literalmente canalizada para equilibrar las fluctuaciones de temperatura durante el invierno o el verano.
La idea de TownRock Energy va un poco más lejos. Utilizando tecnología existente, con colectores de aire en el techo del local. Aspirarán el aire caliente expulsado por los asistentes para trasladarlo al suelo.
En el suelo, habrá 17 enormes agujeros, cada uno de ellos perforado en la tierra entre 150 y 200 metros. El calor que se ha captado calentará las rocas circundantes actuando como una «baterías de calor».
Después, entre semana, cuando el edificio es utilizado como espacio para oficinas y arte, suele ser necesario tener la calefacción activada. En esos momentos, el calor se puede bombear desde las rocas, al edificio de arriba.
Como comenta el fundador de TownRock Energy… «el sistema puede cambiar rápidamente de modo, permitiendo incluso que el edificio se caliente hasta las 4 de la tarde de un viernes, momento en el que el sistema de refrigeración entra en funcionamiento cuando llegan los invitados. La energía de la gente será suficiente para calentar el edificio durante los meses más fríos, cuando Glasgow ronda los 40 grados Fahrenheit de media».
Y por si te interesa, la fiesta de lanzamiento de BODYHEAT se llevará a cabo durante la COP26 el domingo 7 de noviembre, durante la adquisición del New York Times Climate Hub en SWG3.
¡Si te ha gustado el artículo, puntúa y comparte!